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Fósiles cámbricos: tan lejanos y tan próximos

leanchoilia

A pesar de que muchos fósiles no ofrecen mucha más información que su propia morfología, lo que puede permitir asignarlo a un grupo de organismos, o a crear un grupo nuevo, existen fósiles que ofrecen mucha más información. En determinados lugares, en los que la vida se conservó petrificada de un modo especial, lo que cuentan los fósiles puede ser extraordinariamente significativo.

Uno de esos lugares está en China y es la formación geológica Chenjiang. Los estratos cámbricos de esa formación son, como los de otras regiones del planeta, los más profundos, entre los que albergan vida compleja. Pero en pocos lugares se manifiesta de un modo tan intenso esa complejidad delos seres vivos como en la formación china.

Estas mismas páginas [las de Naturalia] (Naturalia 2012, vol.3, nº4, pág. 31) se hicieron eco del hallazgo del fósil de un artrópodo, Funxianhuia, en esta formación, en el que se conservaba la huella de lo que fue su cerebro, perfectamente identificable y similar al de artrópodos actuales.1

Ahora, regresamos a aquellos estratos para fijarnos en otro artrópodo: Alalcomenaeus sp. Un equipo internacional de investigadores ha descrito el perfil neuroanatómico más completo que se conoce de un animal encontrado en estratos cámbricos.2 Se aprecia en ese fósil la marca dejada por el cerebro y el cordón nervioso que parte de él, extendiéndose a lo largo de todo su cuerpo. La disposición del sistema nervioso es interpretada como perteneciente a la que presentan los artrópodos quelicerados, tales como el actual Limulus, uno de los géneros de los llamados cangrejos cacerola, xifosuros más similares a los arácnidos que a los cangrejos.

Con estos datos, la conclusión de los paleontólogos es que los dos tipos principales de sistemas nerviosos de los artrópodos existían en la vida cámbrica. Fuxiahuia y Alalcomenaeus son la evidencia. La complejidad actual ya existía en el pasado más remoto. La modernidad biológica fue esencial en aquel mundo perdido.

Foto: Fósil de Leanchoilia illecebrosa, especie próxima al más raro Alalcomenaeus.

Referencias

  1. Ma, X. y otros. 2012. Complex brain and optic lobes in an early Cambrian arthropod. Nature 490: 258-262.

  2. Gengo, T. y otros. 2013. Chelicerate neural ground pattern in a Cambrian great appendage arthropod. Nature 502: 364-368.

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